Montañez minutos antes de salir del hospital. (Suministrada)
Por Damaris Hernández Mercado / dhernandez1@elnuevodia.com
Tras cumplir hoy un mes de su accidente automovilístico en Colombia el cantante Andy Montañez va camino a su casa luego de que esta tarde fuera dado de alta del Hospital Pavía, en Santurce.
Un emocionado sonero reveló que se siente muy bien, feliz y loco por recuperase a plenitud para reciprocar el cariño del pueblo en su concierto del 14 de julio en el Coliseo de Puerto Rico, José Miguel Agrelot.
“Hace un mes exacto fue el accidente y hoy al fin salimos a la casa. Me siento bien chévere y con los deseos de recuperarme rápido para estar con mi gente. Tengo todo el ánimo para ese concierto y estar con todos los amigos y celebrar los 50 años de mi carrera”, sostuvo a El Nuevo Día antes de llegar a su residencia.
El eterno “Niño de Trastalleres” contempla irse unas semanas para Luquillo en busca de encontrar tranquilidad cerca del mar.
“El implante fue un éxito, funcionó perfectamente y mi pie derecho no perdió movimiento. Me voy a tomar tiempo a lo mejor me voy a Luquillo para coger las cosas con calma y así recuperarme que es mi meta para el concierto”, indicó el intérprete de “Las hojas blancas”.
Por ahora el salsero camina apoyado de un andador, el que tendrá que utilizar por unos días más, hasta tanto logre apoyarse en ambos pies.
El cantante fue sometido a cuatro operaciones en el pie derecho desde que se accidentó en Colombia. La última fue un implante de piel (del área del muslo del cantante) en el empeine la semana pasada.
“La piel se ha ido pegando muy bien y la del muslo está normal. Te puedo asegurar que me puedo hasta apoyar en el pie pero no debo lastimarlo. Estoy con andador, pero tengo el presentimiento de que el día del concierto no voy a necesitar ni el bastón ni el andador”, afirmó el artista.
De esta experiencia el salsero reconoció que reafirmó su fe en Dios, los amigos y la familia.
“Alguien me dijo que el pueblo de Puerto Rico estaba arrodillado pidiendo por mi salud. Esa es la grandeza de Dios. Ese Dios una vez más me demostró que estaba conmigo eso es lo que he aprendido de este tiempo. Además de descubrir los grandes y verdaderos amigos… que son muchos”, manifestó.
